sábado, 2 de marzo de 2019

Serie: Liberándonos de nuestras inseguridades ante el llamado de Dios Cuarta Parte: Temor a la falta de credibilidad

«Moisés volvió a preguntar: —¿Y qué hago si no me creen ni me hacen caso? ¿Qué hago si me dicen: “El Señor no se te ha aparecido”?» Éxodo 4:1 NVI

Está es la nueva objeción de Moisés, el miedo a que no creyeran en él, en su ministerio. Ya le había pasado y pensaba ¿qué había cambiado ahora? 

Ese es un temor con el que creo todo líder tiene que batallar porque si la gente a la que tienes que liderar no tienen confianza en ti, la cosa no va a funcionar. Un líder necesita que la gente le siga y por lo tanto es tremendamente importante que le reconocieran como el enviado de Dios para liberarlos, qué confiarán en él.

¿cuál fue la respuesta de Dios? La encontramos en los versículos  (vv. 2-9)

Serie: Liberándonos de nuestras inseguridades ante el llamado de Dios Tercera Parte: Temor al rechazo ante la falta de un conocimiento profundo de Dios

leamos la objeción de Moisés:

Éxodo 3:13 NVI “Pero Moisés insistió: —Supongamos que me presento ante los israelitas y les digo: “El Dios de sus antepasados me ha enviado a ustedes”. ¿Qué les respondo si me preguntan: “¿Y cómo se llama?” 

Dios había tratado con él en el desierto a través de su oficio de pastor, lo había cambiado, de estar en el palacio a guiar ovejas. Habría aprendido mucha pero que mucha paciencia, entre otras cosas. Ahora el Dios Santo se le había aparecido en el desierto. Había tenido una experiencia tremenda. Su sola presencia cambió el lugar y de simple arena pasó a lugar santo. Pero había tanto que él, Moisés, tenía que conocer de Dios aún. ¿cómo me presento yo ahora y qué les digo, cómo respondo a sus preguntas? No conozco lo suficiente. ¿Cómo te llamas? El Nombre significaba lo que era la persona, su naturaleza, su carácter, sus atributos, su ser. ¿Cómo era Dios? ¿Cómo se llamaba?

Si la falta de conocimiento de Dios fuese un inconveniente para servirle la mayoría no podríamos servirle, pero mira la respuesta de Dios.

Serie: Liberándonos de nuestras inseguridades ante el llamado de Dios Segunda Parte: falta de fe en uno mismo, es decir, baja autoestima

Cómo vimos en la introducción Moisés al igual que tú y yo recibió un llamado al servicio de Dios ¿cómo reaccionó? 

Leamos la respuesta que Moisés le dio a Dios en Éxodo 3:11 NVI “Pero Moisés le dijo a Dios: —¿Y quién soy yo para presentarme ante el faraón y sacar de Egipto a los israelitas?”

La respuestas fue ¿y quién soy yo?. Denota una falta de confianza en sí mismo tremenda, una baja autoestima. No se consideraba capacitado para presentarse ante el faraón y llevar a libertad a los israelitas. Si lo piensas, él había crecido como hijo de la hija del faraón, por lo tanto habría sido preparado en su juventud para poder en su momento ser faraón. Sabría muy bien cómo defenderse en el palacio, pero, él conocimiento del mundo no le había dado una confianza fuerte en sí mismo.

Serie: Liberándonos de nuestras inseguridades ante el llamado de Dios Primera Parte: Recibe el llamado


¿cuántas veces has oído que en Cristo Jesús has sido llamad@ con propósito y piensas que eso no es para ti? ¿cuántas veces te has visto o ves insignificante e insuficiente para lo que Dios te ha llamado?

Dice la Palabra de Dios en  Efesios 2:10 NVI “Porque somos hechura de Dios, creados en Cristo Jesús para buenas obras, las cuales Dios dispuso de antemano a fin de que las pongamos en práctica.”.

Este versículo siempre me ha encantado: