Nehemías 1 - Primera oración de Nehemías

Hoy vamos a iniciar el estudio del libro de Nehemías. Como digo en otras ocasiones, usaré la versión de la Biblia Reina Valera Antigua, ya que es de Dominio Público. Puedes tomar tu Biblia e ir siguiéndolo en tu versión.

En este libro encontramos principios prácticos para llevar la obra de Dios enfrentando oposición.

El lema de este libro bien podría ser: Si no eres activo en la obra de Dios, comprueba que tu fe no esté muerta, porque debe haber siempre un equilibrio entre fe y obra.

Whitcomb dice de este libro y de Nehemías:

"Ninguna otra porción del Antiguo Testamento, nos provee de un incentivo mayor para lograr, un celo verdadero, consagrado y lleno de ciencia por la obra de Dios como el libro de Nehemías. El ejemplo que nos da de la pasión que sentía este gran hombre por la verdad expresada en la Palabra de Dios, cualquiera que fuera el costo o las consecuencias, es un ejemplo que necesitamos enormemente en esta era presente". 


Nehemías significa Jehová consuela, Jehová reconforta y quiero decirte, que Dios quiere confortarte y consolarte en medio de las dificultades que vives en el servicio a Él.


Se solapan en el tiempo algunos pasajes de Esdras y las profecías de Malaquías.


Muy posiblemente Nehemías, que escribe en primera persona e incluye documentos de estado, escribió aproximadamente en el año  430 aC. durante el reinado de Artajerjes. Había pasado 94 años aproximadamente desde el edicto de Ciro y el primer retorno y 13 años del segundo. Esto es importante, pues aunque no son fechas aproximadas nos indicará "el grado de dejadez" del pueblo".

Nicholas Murray Butler dijo:

"Hay tres tipos de personas: las que no saben qué es lo que está sucediendo, las que están pendientes de lo que está sucediendo, las que hacen que las cosas sucedan".


Nehemías muy claramente es el tipo de persona numero tres, que hace que las cosas sucedan. Pero la pregunta es ¿a qué tipo pertenezco yo?.

El libro trata acerca de los muros y de la obra diaria, dándonos un ejemplo de pasión, fuera cual fuera el costo o las consecuencias.


Este estudio anhela incentivar en ti un celo por la obra de Dios, por servirle.

Primero, pongamos un antecedente histórico. El periodo de restauración del pueblo de Israel ocurre entre los años 535 a 425 aC. El libro de Esdras registra el cumplimiento de la promesa de Dios a la nación de Israel por medio de Jeremías de devolverles a su tierra después de setenta años de cautividad. 

En el año 739 aC el Señor dio palabra por medio de Isaías que habría un rey llamado Ciro que liberaría a su pueblo (podéis leerlo en Isaías 45:1-4). En Jeremías 29:10 podemos leer el tiempo aproximado del exilio. 

Cuando esos dos hechos ocurren en el tiempo, Dios libera a su pueblo. Así que te digo, llega un día cuando lo que Dios planeó para ti empieza a rodar en el plano natural. No es que antes o ahora no esté ocurriendo nada, quizás es tiempo de preparación espiritual, de enseñarte, o quizás para ti hoy es el día del tiempo de Dios para que lo que decretó empiece a verse en el plano natural. 

El rey Ciro dio decreto para que el pueblo judío pudiese volver y así ocurre, Los repatriados habían comenzado la obra de reconstrucción de las murallas de Jerusalén, pero en el capítulo cuatro de Esdras podemos leer como aparece la primera oposición. Los samaritanos le había escrito al entonces rey en el poder Aratajerjes Longimano (464-423 aC) advirtiéndoles que les sería perjudicial permitir la continuación de proyecto (Esdras 4:12), Cuando los samaritanos recibieron la orden real de detener la reconstrucción, destruyeron violentamente las murallas ya parcialmente construidas y quemaron las puertas con fuego (Esdras 4:7-23 y Nehemías 1:3). Y el desanimo y la indiferencia incidieron nuevamente en el pueblo repatriado.

¡Qué tremendo! Leamos ahora nuestro capítulo 

1 Palabras de Nehemías, hijo de Hachâlías. Y acaeció en el mes de Chisleu, en el año veinte, estando yo en Susán, capital del reino,

Nehemías que va a escribir en primera persona  deja claro el momento en el que ocurren los hechos. Dice que es el mes Chisleu o Quisleu, lo que sería para nosotros diciembre. También nos dice que es el año veinte en Susa la capital del reino. En este tiempo era Artajerjes I quien estaba gobernando y escribe desde Susa, donde el rey tenía su residencia de invierno.

2 Que vino Hanani, uno de mis hermanos, él y ciertos varones de Judá, y preguntéles por los Judíos que habían escapado, que habían quedado de la cautividad, y por Jerusalem.3 Y dijéronme: El residuo, los que quedaron de la cautividad allí en la provincia, están en gran mal y afrenta, y el muro de Jerusalem derribado, y sus puertas quemadas á fuego.

Nehemías, que era el copero del rey (versículo 11), nos dice que su hermano Hanani ha vuelto de Jerusalén y con él algunos varones de los judíos. Cuando se encuentran, él le pregunta por los hermanos y por Jerusalén. Y el informe que recibe es tristísimo:

• los que quedaron de la cautividad están en gran mal 
• los que quedaron de la cautividad están en gran afrenta
• el muro de Jerusalén está derribado
• las puertas de Jerusalén están quemadas a fuego.

Las noticias está lejos de ser "buenas nuevas", mas bien, son asoladoras. El pueblo por un lado, afrentados, oprimidos e insultados por los vecinos (como veremos más adelante). Por otro lado, Jerusalén, la ciudad santa, la ciudad de Dios, tiene sus muros y puertas destruidos. ¡Qué imagen más triste!. 

¿Qué haces cuando sabes de una necesidad?. ¿Qué haces cuando quizás ves que la obra de Dios no crece, no avanza en tu lugar? ¿Qué hacemos cuando conocemos que algunos hermanos en otros lugares del mundo están siendo torturados, asesinados? No pregunto, ¿qué sientes, o qué siento yo?, sino ¿qué haces, qué hago yo?.

4 Y fué que, como yo oí estas palabras, sentéme y lloré, y enlutéme por algunos días, y ayuné y oré delante del Dios de los cielos.

 Nehemías nos deja claro sus sentimientos y sus hechos:

1. se sentó a llorar
2. se enlutó
3. ayuno 
4. oró

¿Fue una situación momentánea, movida por el sentimiento del momento?. Nada de eso. Según leeremos en el capítulo siguiente, pasan cuatro meses. 

¿Ante quien llora? y esto es tremendamente importante. Algunos se lamentan con otros y comparten sus emociones con otros y no digo que esté mal, pero él lo hizo ante aquel que podía traer un cambio tanto a lo que sentía como a lo que ocurría. Vino ante el Dios de los cielos, el gobernador supremo. Él estaba por encima de cualquier rey pagano.

5 Y dije: Ruégote, oh Jehová, Dios de los cielos, fuerte, grande, y terrible, que guarda el pacto y la misericordia á los que le aman y guardan sus mandamientos;6 Esté ahora atento tu oído, y tus ojos abiertos, para oír la oración de tu siervo, que yo hago ahora delante de ti día y noche, por los hijos de Israel tus siervos; y confieso los pecados de los hijos de Israel que hemos contra ti cometido; sí, yo y la casa de mi padre hemos pecado. 7 En extremo nos hemos corrompido contra ti, y no hemos guardado los mandamientos, y estatutos y juicios, que mandaste á Moisés tu siervo.8 Acuérdate ahora de la palabra que ordenaste á Moisés tu siervo, diciendo: Vosotros prevaricaréis, y yo os esparciré por los pueblos:9 Mas os volveréis á mí, y guardaréis mis mandamientos, y los pondréis por obra. Si fuere vuestro lanzamiento hasta el cabo de los cielos, de allí os juntaré; y traerlos he al lugar que escogí para hacer habitar allí mi nombre.10 Ellos pues son tus siervos y tu pueblo, los cuales redimiste con tu gran fortaleza, y con tu mano fuerte.11 Ruégote, oh Jehová, esté ahora atento tu oído á la oración de tu siervo, y la oración de tus siervos, quienes desean temer tu nombre: y ahora concede hoy próspero suceso á tu siervo, y dale gracia delante de aquel varón. Porque yo servía de copero al rey.

Nehemías va a compartir con nosotros su oración. ¿Sabes que oír la oración de una persona dice mucho acerca de la persona?. Veamos que nos dice acerca de este hombre y también qué fue lo que pidió a Dios.

Primero, se acerca a Dios en base a lo que es Él, a su posición, a su poder, a su fidelidad. Tiene una revelación tremenda de quien es Dios y se acerca a Dios según le conoce. Y le conoce como:

• Dios de los cielos
• fuerte, grande y temible
• que guarda el pacto y la misericordia a los que le aman y guardan sus mandamientos

Está viendo un gran problema, pero sabe que su Dios es más, mucho más grande y poderoso que la dificultad y los enemigos del pueblo. Su Dios tiene autoridad por encima de cualquiera y su Dios es un Dios de fidelidad.

Segundo, pidió a Dios que le oyera, pero nos comparte que no es una oración de hoy sí y mañana me olvido, él perseveraría, día y noche. ¿Eres perseverante?. El siervo de Dios sí lo era.

Tercero, confesó los pecados del pueblo como suyos propios. Que cosa, ¿verdad? Muchos solo ven su santidad y la pecaminosidad del de enfrente. Como bien dice la Escritura, vemos la astilla en el ojo de otra persona y no somos capaces de ver lo que hay de mal en nuestra propia vida. Pero además. en este caso, no solo no dice los pecados que tiene el pueblo como una crítica sino que los identifica como suyos. Pregúntate:

• ¿eres de los que fabrican excusas, de los que echan las culpas a otros o de los que toman las riendas y deciden pedir perdón y buscar un cambio? 
• ¿cuánto no cambia en tu vida porque sencillamente no eres capaz de reconocer que estás donde estás como consecuencia del pecado?.

Cuarto, destaca la gran diferencia entre ellos y Dios.

•  Nos dijo que le hablaba al Dios de los cielos,  y vemos como él se identifica como siervo y al pueblo también.
• Nos compartió acerca de la fidelidad y el poder de Dios y por otro lado, reconoce la realidad de quienes son ellos, gente que se había corrompido contra Dios. gente que no había guardado el pacto.

Quinto, le dice a Dios "Acuérdate". ¿Creemos que tenemos que recordar a Dios? No, ni mucho menos, pero al decir esto, está reclamando la promesa dada por Dios. ¿Cuál era la promesa? "... os traeré al lugar que yo escogí para hacer habitar allí mi nombre". El pueblo había vuelto pero la promesa de retorno del pueblo de Dios era más que ellos volvieran a la tierra, era que Dios estuviera en medio de ellos. Está pidiendo esta realidad.

Sexto, apela a las grandes cosas que ha hecho por ellos. Son tu pueblo, tus siervos, aquellos que has redimido, con gran fortaleza y mano fuerte, ¿si Tú no los defiendes, quién los defenderá?.

Septimo, quiere ser parte de la solución de Dio y por ello pide el favor de Dios para que el rey le concediese ir a Jerusalén. En este tiempo de oración y ayuno, ha sentido que Dios quiere que sea parte fundamental de ese cambio pero sabe que hay obstáculos naturales que deben ser superados y pide a Dios que obre en ellos. Muy posiblemente tenía una vida cómoda. Como copero del rey, tendría comodidades, reconocimiento, posición, responsabilidad, participaría de los secretos de rey, pero anhelaba hacer grandes cosas para Dios y su pueblo. Anhelaba ver el reino de Dios estableciéndose entre su pueblo. anhelaba ver a Dios morando entre su pueblo.

Octavo, la oración de este hombre hizo que Dios interviniera, cambiaría el curso de la historia, la vida de muchos, la suya propia. 

Al igual que William Carey dijo, quiero terminar diciéndote: 
Espera de Dios grandes cosas.

Haz grandes cosas para Dios.

Haz grandes cosas con Dios.

Que el Señor te bendiga.

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Bibliografía:

Santa Biblia - Versión Nueva Traducción Viviente - Versículo fotografía
Santa Biblia . Versión Reina Valera Antigua RVA

Comentario Bíblico Mattew Henry

Comentario Moody Antiguo Testamento