Proverbios 1:8-9 Oye, hijo mío, la doctrina de tu padre, Y no desprecies la dirección de tu madre: porque adorno de gracia serán á tu cabeza, Y collares á tu cuello.
En estos capítulos, sobre todo hasta el capítulo 10 vamos a ver al escritor, hablando como si fuera un padre.
Nunca olvidemos que aunque los consejos vengan de Salomón, realmente vienen de nuestro Padre que quiere lo mejor para nosotros.
¿Qué dice? Oye, escucha